Barreras de acceso a la educación
En Europa, 1 de cada 4 personas con discapacidad percibe barreras a la educación. A pesar de que las cifras son similares en cuanto a la distribución por sexo, las mujeres perciben barreras en la educación en mayor frecuencia que los hombres. En este sentido, podríamos encontrarnos ante la doble discriminación que sufren las mujeres con discapacidad: por razón de género y por la discapacidad.
Por otro lado, en España, los jóvenes con discapacidad -de entre 15 y 24 años- que no estudian ni trabajan representan un porcentaje superior a la media europea, independientemente de la discapacidad. El 27% de los jóvenes españoles con dificultad en las actividades básicas no estudian ni trabajan frente al 24% del conjunto de jóvenes europeos. En el caso de los jóvenes sin dificultad en las actividad básicas las cifras se reducen a 19% y 12% respectivamente. Así, los jóvenes con dificultad en las actividades básicas encuentran más barreras de acceso a la educación y al mercado de trabajo que el resto.